Fue construida en estilo gótico por Miguel de Perea ayudado de Sancho de Escalante en 1551. En 1654, Pedro de Palacios la transforma construyendo un altar para colocar una imagen de Santiago traída desde la Iglesia de la Purísima Concepción.
En 1955 se restaura la capilla y se le quita el enfoscado que ocultaba la sillería